La Consejería de Educación, Ciencia y Formación Profesional ha resuelto la convocatoria para la adscripción de centros educativos públicos de niveles previos a la universidad a la Red de Bibliotecas Escolares de Extremadura (REBEX), que se ha solventado con trece nuevos centros educativos adscritos, que van a recibir 51.943 euros.
El Diario Oficial de Extremadura (DOE) ha publicado esta resolución de la Consejería, que distribuirá un total de 148.057 euros entre 212 centros que ya pertenecen a la REBEX y que han optado a una línea de ayudas convocada. Actualmente conforman esta red 438 centros educativos.
El pasado mes de octubre el DOE publicó la orden para convocar el procedimiento para la adscripción de centros educativos públicos de niveles previos a la universidad a la REBEX, destinada al segundo ciclo de Educación Infantil, Educación Primaria, Educación Secundaria, Educación Especial, Enseñanzas Artísticas, Educación de Personas Adultas y Escuelas Oficiales de Idiomas.
Se establecían dos líneas de dotación de fondos. La Línea 2, específica para los centros que desearan adscribirse a la Red de Bibliotecas Escolares de Extremadura, con el compromiso de cumplir las responsabilidades derivadas de su pertenencia a ella, y la Línea 3, destinada a los centros que ya pertenecen a esta red.
Los centros educativos seleccionados en esta convocatoria por la Línea 2 van a disfrutar de un máximo de 4.000 euros cada uno para la mejora de los recursos, infraestructuras y equipamientos de la biblioteca, así como aquellos que le correspondan como centro perteneciente a la REBEX.
Por su parte, los centros educativos de la Línea 3, ya adscritos a la REBEX, reciben un máximo de 2.000 euros, atendiendo a las actuaciones o iniciativas que vayan a poner en marcha desde la biblioteca escolar para el fomento de la lectura y la alfabetización mediática e informacional del alumnado. También se tendrá en cuenta la utilización que se haga en su centro de la biblioteca digital Librarium y su participación en las distintas iniciativas que organiza la Consejería de Educación, Ciencia y Formación Profesional.
Estos centros educativos tendrán que utilizar la biblioteca escolar como un centro de recursos impresos y digitales para la lectura, información y aprendizaje, así como un espacio educativo abierto, física y virtualmente, de apoyo a los procesos formativos, desarrollo de las competencias clave, el fomento de la lectura, la práctica de idiomas y la alfabetización mediática e informacional del alumnado, entre otros.