La directora general del Instituto de la Mujer de Extremadura (IJEX), Beatriz Arjona Rovira, ha destacado este miércoles la labor que se realiza desde el servicio ambulatorio de atención a víctimas de violencia de género, así como desde el dispositivo de atención a menores de la Casa de la Mujer de Cáceres, como herramientas fundamentales para la recuperación integral de las víctimas y de sus hijas e hijos.
El servicio ambulatorio para víctimas de violencia de género se puso en marcha en Extremadura el pasado mes de abril, y desde entonces atiende tanto a las mujeres que se encuentran viviendo dentro del espacio de acogida de las casas de la mujer de Cáceres y Badajoz como a otras que viven en sus propios domicilios, sin necesidad de que hayan formulado una denuncia, así como a familiares y allegados que las puedan ayudar.
A todas ellas, y a su entorno, se les presta asesoramiento psicológico, jurídico y social, logrando también una mejor optimización de los recursos del IMEX.
Este nuevo recurso no sólo atiende a víctimas de violencia de género, ejercida por sus parejas o exparejas, sino también a todas las mujeres que sufran cualquier tipo de violencia contemplada en el Convenio de Estambul, como la violencia sexual, trata, gestación subrogada y matrimonios forzados, entre otras.
Arjona Rovira se ha reunido con las responsables del servicio ambulatorio y con las del equipo de atención a menores para conocer de primera mano el funcionamiento de ambas unidades, y ha destacado durante el encuentro la importancia de la detección precoz para poder dar una respuesta lo más pronta posible a las mujeres y sus hijas e hijos.
En cuanto al dispositivo de atención a menores, la directora general del IMEX ha puesto en valor este recurso, que atiende a las niñas y niños que han sufrido o viven en un contexto de violencia de género, porque “son los grandes olvidados” y necesitan de todo el apoyo que se les pueda ofrecer porque “en un futuro pueden normalizarla y llegar también, en cierto modo, a ser agresores o tolerarla”.
En los espacios de acogida de las Casas de la Mujer de Cáceres y Badajoz conviven de media, entre 9 y 10 mujeres, con sus hijas e hijos, respectivamente, llegando a acoger a lo largo de un año a unas 60 víctimas.
La directora del IMEX ha estado acompañada por la directora de la Casa de la Mujer de Cáceres, Raquel Muñoz, y por las psicólogas del servicio ambulatorio y del dispositivo de atención a menores, Irene Serradilla y Nieves Calderón.